En la actualidad, la protección de datos en los teléfonos móviles es un asunto de máxima prioridad tanto para fabricantes como para s. Entre los sistemas de autenticación, el reconocimiento por huella dactilar destaca por su comodidad y aparente alto nivel de seguridad. Sin embargo, la reciente aparición de BrutePrint, un sofisticado ataque de fuerza bruta desarrollado por investigadores, ha evidenciado importantes debilidades en estos sistemas biométricos. Este artículo explora en profundidad la técnica BrutePrint, las vulnerabilidades que explota, el impacto real en la seguridad de Android, iOS y HarmonyOS, y cómo puedes protegerte frente a esta amenaza.
¿Qué es BrutePrint y cómo desafía la seguridad biométrica?
BrutePrint es una técnica avanzada de ataque de fuerza bruta dirigida a los sistemas de autenticación de huellas dactilares en teléfonos inteligentes. A diferencia de otras estrategias conocidas, que suelen requerir la imitación física del dedo (mediante moldes de silicona, impresiones de tinta conductora, etc.), BrutePrint utiliza principalmente medios digitales, lo que lo convierte en una amenaza mucho más eficiente y menos invasiva.
Desarrollado por investigadores de la Universidad de Zhejiang y Tencent Labs, este método saca partido de fallos en la implementación estándar de los sensores de huellas dactilares, especialmente en Android y HarmonyOS. El principal punto de debilidad es que muchos dispositivos no cifran el canal de comunicación entre el sensor biométrico y el sistema, permitiendo así la interceptación y manipulación de los datos en tránsito.
Este tipo de ataque va más allá de lo físico y, gracias al uso de bases de datos de huellas, algoritmos avanzados y hardware de bajo coste, permite enviar múltiples muestras al sensor hasta conseguir una coincidencia lo suficientemente cercana para desbloquear el terminal.
La singularidad de la huella dactilar y cómo la explota BrutePrint
Las huellas dactilares siempre se han visto como un rasgo virtualmente único e inmutable de cada persona. Desde que Sir Francis Galton calculó en el siglo XIX que la probabilidad de coincidencia era de aproximadamente una entre sesenta y cuatro mil millones, ese mito de seguridad ha persistido. Sin embargo, en el mundo digital las cosas se complican.
El sistema biométrico de los móviles depende de la calidad del sensor, su tamaño, resolución y los algoritmos internos. A diferencia del sistema analógico, aquí la coincidencia no requiere una correspondencia exacta, sino que utiliza umbrales de aceptación. Por ejemplo, Apple estima que en Touch ID la probabilidad de coincidencia errónea es de 1 entre 50.000, pero en sensores más económicos este ratio puede ser mucho peor, situando el espectro de ataque al alcance de métodos automáticos como BrutePrint.
En esta técnica, la Tasa Falsa de Aceptación (FAR) juega un papel clave. Manipulando este parámetro, BrutePrint logra que el sistema acepte huellas ‘suficientemente’ similares a la real, aunque no idénticas, lo que aumenta las probabilidades de éxito del ataque.
Vulnerabilidades técnicas que permite explotar BrutePrint
Para que BrutePrint funcione, es indispensable explotar dos vulnerabilidades presentes en la mayoría de móviles Android y HarmonyOS:
Cancel-After-Match-Fail (CAMF)
CAMF aprovecha un matiz en el mecanismo de autenticación. Normalmente, al fallar un intento, el sistema suma un contador para limitar los s. Sin embargo, si el proceso se cancela de una manera específica, ese intento no se contabiliza como fallido. El ataque envía varias imágenes, y si ninguna coincide, fuerza un error controlado que permite volver a empezar sin consumir el valioso número de intentos permitido, permitiendo en la práctica intentos ilimitados.
Match-After-Lock (MAL)
Por defecto, tras varios intentos fallidos, el sistema bloquea el sensor por un tiempo o exige otro método de autenticación. Sin embargo, en algunos móviles, la autenticación biométrica sigue activa e incluso permite seguir probando huellas durante el periodo de bloqueo, facilitando la posibilidad de continuar el ataque hasta encontrar una coincidencia.
Canal de comunicación SPI sin cifrar
El canal Serial Peripheral Interface (SPI) conecta el sensor de huella con el procesador del teléfono. La ausencia de cifrado permite que un atacante inserte un dispositivo entre ambos y pueda capturar, modificar o inyectar datos sin ser detectado por el sistema operativo.
Manipulación de Tasa FAR
Una de las claves del éxito es la manipulación de la Tasa Falsa de Aceptación. Al alterar esta tasa, se amplía el margen de lo que el sistema considera una ‘huella válida’, lo que facilita que huellas similares pero no idénticas terminen siendo aceptadas para el desbloqueo.
Cómo se realiza un ataque BrutePrint paso a paso
- físico: El atacante debe tener el teléfono en su poder (por ejemplo, un móvil robado o extraviado).
- Desmontaje: Es necesario retirar la tapa trasera y acceder a la placa base del móvil. Al quitar la carcasa, se accede al puerto del sensor biométrico (el canal SPI).
- Conexión del dispositivo de ataque: Se conecta un pseudosensor o una placa externa, de coste muy bajo (alrededor de 15 dólares), que hace de intermediario entre el sensor y el sistema operativo.
- Carga de base de datos de huellas: El atacante utiliza una base de datos de huellas dactilares, que puede obtenerse de filtraciones, repositorios académicos, bases de datos propias, o imágenes adaptadas por IA.
- Aplicación de fuerza bruta: Mediante técnicas automáticas y la explotación de CAMF y MAL, el dispositivo inyecta miles de imágenes de huellas en el sensor, manipulando la tasa de aceptación y evitando el bloqueo tras errores sucesivos.
- Desbloqueo: Cuando una muestra es aceptada como válida, el sistema desbloquea el móvil. Según el número de huellas registradas en el terminal y la precisión del sensor, este proceso puede durar desde menos de una hora hasta 14 horas.
¿De dónde provienen las huellas usadas en BrutePrint?
Uno de los temas más preocupantes es la procedencia de las bases de datos de huellas dactilares usadas en estos ataques. Aunque los investigadores no revelaron fuentes concretas, existen varias formas de obtener grandes cantidades de huellas:
- Filtraciones y fugas de datos biométricos en Internet.
- Bases de datos de investigaciones académicas o forenses.
- Recopilación fraudulenta en apps maliciosas.
- Recreación sintética mediante Inteligencia Artificial, lo que permite ‘fabricar’ huellas con alta probabilidad de coincidencia manipulando la tasa FAR.
Antes de iniciar el ataque, estas huellas pasan por algoritmos de transferencia de estilo neuronal para adaptar el formato a cada modelo de sensor específico del dispositivo objetivo.
Tiempo estimado para romper la protección biométrica con BrutePrint
El éxito de BrutePrint depende de múltiples factores:
- Calidad y tipo de sensor: Sensores de baja resolución o de menor precisión son más vulnerables.
- Número de huellas registradas: Cuantas más huellas tenga configurado el teléfono, más fácil y rápido es el ataque, ya que se multiplican las posibilidades de combinar muestras similares.
- Modelo y sistema operativo: Algunos fabricantes implementan bloqueos adicionales.
Según los experimentos realizados:
- Si solo hay una huella registrada, pueden tardar entre 2,9 y 14 horas en lograr el desbloqueo.
- Si están registradas todas las huellas posibles (4 en Samsung, 5 en la mayoría), el tiempo desciende notablemente, llegando a entre 40 y 60 minutos, o incluso menos de una hora en algunos casos.
Esta diferencia se debe a que cada huella adicional registrada es una nueva vía potencial de coincidencia parcial, acelerando el proceso.
Dispositivos más afectados por BrutePrint: Android, HarmonyOS e iPhone
Los resultados de los estudios internacionales señalan que la amplia mayoría de los smartphones Android y HarmonyOS son vulnerables, sin importar la marca. Modelos populares de Samsung, Xiaomi, Vivo y Huawei han sido hackeados con éxito mediante esta técnica. El denominador común es la ausencia de cifrado o malas prácticas de seguridad en la comunicación del sensor y la implementación defectuosa del bloqueo tras errores consecutivos. Descubre cuáles son los móviles más seguros para 2024 para reducir el riesgo de ser víctima de ataques como BrutePrint.
En el caso de iPhone, la situación es muy distinta. Apple implementa cifrado de extremo a extremo entre el sensor Touch ID y el sistema operativo, lo que impide la manipulación directa de datos biométricos. Aunque los investigadores consiguieron aumentar el número de intentos permitidos en algunos modelos de 5 a 15, no existe la posibilidad de intentos ilimitados como en Android.
Además, la mayoría de iPhone recientes emplean Face ID, lo que dificulta aún más el uso de BrutePrint. Por tanto, los dispositivos de Apple, aunque no son inmunes al 100%, sí ofrecen una resistencia muy superior a este tipo de ataque.
Factores técnicos y humanos que influyen en el peligro real de BrutePrint
La amenaza de BrutePrint es real, pero no absoluta. Los expertos coinciden en que, aunque el ataque es viable a nivel técnico, existen barreras prácticas que limitan su uso masivo:
- físico obligatorio: El móvil debe estar en manos del atacante durante horas, lo que limita su aplicabilidad real.
- Necesidad de desmontaje: Quitar la tapa trasera y acceder al sensor puede dañar el terminal, dejando huellas de manipulación.
- Requiere hardware especializado (aunque barato): El dispositivo de ataque cuesta entre 12 y 15 dólares, asequible para cualquier ciberdelincuente.
- Duración del proceso: Incluso con el máximo de huellas registradas, el ataque puede durar casi una hora, lo que lo hace inviable para robos exprés pero sí viable para ataques dirigidos.
- Complejidad técnica: Se necesita conocimiento en hardware, modificación de bases de datos e IA para adaptar las huellas.
No obstante, la posibilidad de comercialización de dispositivos listos para usar podría reducir aún más estas barreras en el futuro.
Limitaciones y riesgos derivados de BrutePrint
- Imposibilidad de ataque remoto: BrutePrint solo funciona con directo al dispositivo.
- No es aplicable si el móvil está muy protegido físicamente o no se puede abrir sin romperlo.
- Genera evidencias físicas de manipulación (roturas internas, daños en la carcasa, etc.).
Estas limitaciones dificultan la masificación del ataque, pero el riesgo es significativo para objetivos de alto valor, móviles robados, auténticos investigadores forenses o acciones maliciosas bien planificadas.
Consejos prácticos para protegerte frente a BrutePrint
La mejor defensa siempre es la prevención. Los principales consejos de expertos en ciberseguridad son:
- Registra el mínimo de huellas posibles, preferiblemente solo un dedo. Cuantas menos huellas haya, menor probabilidad de coincidencia por fuerza bruta.
- Elige métodos alternativos de desbloqueo: Usa un PIN robusto, contraseña o reconocimiento facial cuando sea posible, sobre todo en situaciones de alto riesgo.
- Actualiza siempre el software: Los fabricantes están corrigiendo estas vulnerabilidades en nuevas versiones. Mantén tu sistema al día para recibir los últimos parches.
- Evita dejar tu móvil desatendido en lugares públicos o poco seguros. Recuerda que el ataque requiere físico prolongado.
- Solicita asistencia profesional si tu móvil ha sido manipulado (carcasa rota, funcionamiento extraño, etc.).
- No compartas ni subas tu huella dactilar en apps o servicios no verificados.
Recuerda que algunos sistemas, como Apps para descifrar wifi, permiten proteger aún más tu dispositivo y reducir el riesgo de ataques biométricos peligrosos.
El futuro de la autenticación biométrica y la carrera por la seguridad
El avance de ataques como BrutePrint obliga a los fabricantes a tomar medidas drásticas para asegurar el canal de comunicación biométrica y reforzar la infraestructura de los sensores. Es previsible que en futuras generaciones de móviles Android y HarmonyOS se incorpore cifrado robusto en la vía SPI, técnicas de detección de manipulación e inteligencia artificial defensiva capaz de identificar patrones de fuerza bruta desde el primer intento. Además, los s deben ser conscientes de que ningún sistema es infalible si las claves biométricas se ven comprometidas.
Con la creciente integración de la biometría en servicios bancarios, apps corporativas y vida digital, la protección de datos personales gana aún más importancia. Ante el reto de la fuerza bruta automatizada, la defensa debe ser multicapa: hardware seguro, canal cifrado, bloqueo inteligente y sentido común del .